Karate Imberbe

Ayer llego el chato con la ñata medio adornada. ¿Qué te paso? le dije, pues que ha llegado al barrio un pata bravo Imberbe, ¿ah sí? ¿Quién? Un patita que tira mecha, es karateca dice, y ayer nos agarramos y me saco la mugre, me dijo deprimido. Cha que, esto no puede ser dije, ahorita vamos a armarle la bronca, cuando llegamos a la cuadra donde vivía el causa, justo le estaba sacando la mugre a 5 patas a la vez con una mano y con la otra estaba comiéndose un chup en plena lluvia. Pucha, pensé, que mas pruebas, este pata es reciazo. Ni hablar chato, caballero nomas, tendremos que ir los fines de semana a aprender karate o judo, no pe imberbe, mi chelita de los sábados no la cambio ni por una gomeada, mira te doy la plata, te matriculas y luego te pago pa que seas mi chaleco, ya pes le dije, el saber no ocupa lugar, así que trae pa acá la plata. Al día siguiente me fui al AELU a inscribirme en judo, llegue al dojo y le explique al profe, un flaco pero con cara de malo, el dilema del chato. NO, me dijo el profe, el judo es un arte de paciencia, camino y docilidad, tú estás buscando venganza. Me fui del dojo derrotado, ¿y ahora? Lo que me dio el loco no alcanza pa contratar a “la moto”. En esas estaba cuando un chinito chato que estaba fumando su pipa me dijo: ¿tú queriendo aprender milenario arte de defensa para proteger amigos? Claro pes tío le dije, yendo a mi dojo, tu aprendiendo, luego defendiendo, ya tío vamos en una nomas. Se paró el venerable anciano empezó a caminar y yo lo seguí. Caminamos largo rato hasta que llegamos a una especie de huerto en donde el tío tenía varios carros antiguos, como 6, pero estaban parados. Yo enseñando arte que enseñar antes a Daniel San y si tu aprender yo regalar carro viejo, ¡Buena tío! ¿Cuál me vas a dar? ¿El chevrolet camaro o el mustang? No, yo regalando el Hillman, o el Datsun Stanza, Bueno, pensé, algo es algo, mejor esos, a la combi VW para hacer movilidad escolar. Ahora, prosiguió el emulo de Miyagui, tu aprendiendo arte mortal, ¡PERO TU OBEDECIENDO! Ya tío lo que digas, ¿quieres que haga el “encerar, pulir”? No Imberbe San, tu aprendiendo técnica más mortal y sanguinaria, tu aprendiendo el “desatorando, desinfectando” pucha tío, esa técnica no suena a técnica sanguinaria, TU OBEDECIENDO, yaya tío, ¿cómo hacemos? Me llevo a un cuarto donde fácil habían 20 waters, y me dijo, empezando técnica, “desatorando, desinfectando”, empezando yo yendo, comiendo durmiendo, huevando, luego regresando y tu terminando, no seas malo pes tío, OBEDECIENDO IMEBRBE SAN! Yayaya tío, y así empecé el duro trajín del aprendizaje del milenario arte, cha que aprender este arte es bravo, aquí hay varios ñobas que aun están a medio usar, pero ya pues por algo me dijo que lo haga, yo hago nomas. Así me pase todo el día desatorando y desafectando, ya medio aburrido estaba cuando terminé, así que salí al patio a tomar aire puro y no morir en medio de esos gases tóxicos, cuando veo a mi maestro haciendo “la grulla” sobre unos palos del jardín, El maestro me vio y se bajó inmediatamente. Me miró a los ojos y me dijo, LO QUE TU VIENDO JAMAS REPITIENDO, GRULLA SIENDO TECNICA MORTIFERA. Ya tío, no te preocupes, yo solo la aplico si hay peligro inminente.
Llegó el fin de semana y le dije al tío Fumanchú, oe tío, hazme la taba para armarle la bronca al causa que le pegó al chato. Yo yendo, dijo el anciano, tu aprender técnica “desatorando desinfectando” tu aprendiendo mucho, tu venciendo hoy día .Fuimos a la cuadra y de nuevo el causa karateca estaba sacándole la mugre a 10 causas y con un gancho de lavar ropa se jalaba las tetillas (ese causa si era maleado). La gente ni se asomaba. Lleno de cólera, fui directamente donde el causa y le dije, oe causa, ya fuiste hoy te reviento conchet…la gente se asomo y empezaron formar un circulo. Trajeron unos tatamis (pa pelear karate como debe ser pes) y nos pusimos nuestros uniformes de combate. Mátalo imberbe, reviéntalo Fu Mao (tal era el nombre del abusivo) Así empezó la lucha con nuestras mejores técnicas, pero Fu Mao, sabia contra técnicas y a cada rato me metía goma. De lejos mi maestro se preocupaba “yo no trayendo hirudoid ni vendas para Imberbe San, ta jorio”, pensaría. Cuando en eso me acorde de la técnica prohibida, aquella que según mi maestro sería mortal y final. Me plante en posición mientras Fu Mao se reía, jajaja ¿La grulla? Esa técnica es vieja Imberbe, vas a morir. Se acerco con la rapidez de un policía de tránsito en plena batida y yo sin pensarlo, aplique la técnica. Cayó Fu Mao con el rostro arañado y sangrando por todas partes, rasguños y laceraciones cubrían su rostro, mientras yo reía. ¿Ya ves?, le dije, ya ándate pa tu casa sino te aplico de nuevo pero Fu Mao ni se movía, estaba inconsciente. La gente empezó a gritar de la emoción, viéndose libres de la amenaza y coreaban mi nombre. Solo mi maestro se acercó preocupado, me miro fijamente a los ojos y me pregunto: Imberbe San ¿Por qué cuando tú aplicando la grulla, rostro de Fu Mao, lleno de rasguños, arañazos profundos y laceraciones? ¿Por qué? Fácil pe tío, hace más de un mes que no me corto las uñas de los pies.