Osito!

Hola osito, hace mucho no te escribía nada. Te voy a contar un secreto, yo antes, antes de conocer a tu mamá e incluso los primeros años tuyos, escribía bastante, nada de poesía porque eso nunca me salió, pero si cuentos y relatos. Me gustaba, era lo mejor para mi. Incluso te he escrito un par de cartitas, para que las leas cuando tengas más edad.
Poco a poco he dejado que la rutina me gane... y ahora casi no escribo nada
Sin embargo, me emociono de pensar que cuando leas mis cartas serás un muchacho de 15 años y yo las escribí cuando tenía solo 20.
Incluso, en este pequeño espacio, que ojalá resista los embates del tiempo, te escribo esta pequeña carta para decirte algo, que no se si lo haré a diario, pero que créeme he estado tratando de hacer siempre.
Decirte: Te quiero mucho osito
No soy capaz de decirte que tu has llenado de con tu luz los espacios y grietas de mi vida, o quizá que tu risa siempre es la musica de mi alma
Diré simplemente esto: cuando naciste, nací yo tambien.
Amé (y quien sabe aún amo) mucho a tu madre, pero no he sido un buen padre, me he perdido millones de oportunidades de estar a tu lado, por trabajar lejos, por trazar un surco en esta vida que es un terreno eriazo... tu sabes que lo hice por ustedes y tambien lo hice por tí...aunque a veces me arrepiento de haber estado tan distante
Luego de muchas peripecias, por fin puedo estar contigo aquí en Lima, sin vislumbrar aún la posibilidad de irme (yo no quiero y mientras pueda no lo haré) pero si alguna vez tenemos que separaranos nuevamente, quiero que sepas que estos meses aquí a tu lado en Lima, todo el día, a pesar de que a veces me enojaba por que quería leer el periodico, a pesar que renegaba porque te levantas tarde para ir al nido, a pesar que a veces llegaba muy cansado del trabajo y solo podía verte acostado en tu cama, esos breves instantes en donde podía verte, esos momentos preciosos han sido para mi más valiosos que todo el oro que les saque a esos cerros
Tú sabes, puede ser que los cerros y sus inexistentes pero misteriosos apus, puedan invocarme y tendre que irme... pero ni siquiera seres como ellos podrán quitarme del corazon la risa de tu alma y el murmullo que tienes en los ojos, esa clarividencia que le pones a la certeza de las cosas, esa duda de niño grande que tienes acerca de la vida, esos instantes en donde tus decisiones son tuyas y cuyo desenlace conozco, pero que a ti te hace tan feliz descubrir
Todos me dijeron que ser padre "era otra cosa" nunca lo entendí... pero sabes, cuando naciste... no solo sentí, sino que palpe, olí, ví , degusté y oí aquella esencia, aquel olor, aquel "algo" en el ambiente
Y si... "era otra cosa"
Estas en mi corazon las 24 horas del día, todos los días de la semana. Y ¿sabes una cosa?, no importa que maldades haya hecho, cuantas lisuras dije, cuantas atrocidades cometí contra el prójimo, cuantas personas humillé, cuantas injurias pronuncié, el saber que tú habitas en mi corazón, el saber que , gracias a EL, en mi corazon negro y putrefacto de tanta malda acumulada, rencores guardados, iras cercanas, allí, en ese medio, puede florecer un amor tan puro como el tuyo, me hace esbozar la mas pura sonrisa que todavía me queda
Te quiero mucho osito, sin tí mi vida, ya no sería vida, sino que seria quel compendio de relatos sucesivos que tuve durante toda mi adolescencia...

Pero ahora gracias a tí, por fin, aunque no tenga ninguna anécdota que contar... vivo

Un abrazo hijo, y gracias a tí, nunca más, jamás, ni siquiera una minúscula fracción de segundo...me quedaré solo