Amigo

Dime amigo, ¿que pensaste? Cuando la sombra de la muerte dejo de ser sombra y se convirtió en la presencia que te llevo de este mundo, cuando la oscuridad de los sueños decidió abrazarte para siempre, cuando la oscuridad del crepúsculo decidió que debías acompañarla
Dime, pensaste en algo? Pensaste en nosotros? En tu familia, amigos, compañeros, en los momentos vividos? Pensaste tal vez cuando niños jugábamos sin mayores preocupaciones que la de ser grandes
Pensaste en mi amigo? Pensaste en nuestra adolescencia salvaje y rebelde, en nuestros sueños e ilusiones en nuestras futuras metas y triunfos…
Pensaste tal vez en tu esposa, a quien tanto has amado…o pensaste en tu hijo, semilla tuya, parte tuya de tu cuerpo, independiente, joven y vivaz, cuyo carácter me recuera a ti
Cuando la muerte, de noche, te tendió su emboscada macabra…pensaste en algo?
Pensaste tal vez en ti mismo?
Que te dolió primero, amigo? Tus cuerpo, tu corazón o tu alma?
Dime amigo, en que te fuiste pensando o tal vez tu eterno sueño, nunca te abandono?

Yo ahora te diré en que pensé.
Pensé en la parte de la vida que nos toca, en nuestra vida juntos, en nuestra alegría, la que nos toco vivir, lejos de la capital, entre montañas verdes y ríos juguetones, pensé en que el sentido de la vida tal vez no fue mas que eso.
Habitas en mi, no como un recuerdo, sino como aquel niño, adolescente y joven que fuiste, cuando fuiste.
Habitas en mí no como esperanza, sino para siempre como parte de mi alma, una parte que me ha sido quitada no para siempre.
Fueron tus goles en los partidos mis goles, y fueron tus momentos mis momentos

Ahora amigo… debo proseguir solo

Y ese recuerdo con tu partida, no se ha muerto, pero hasta un momento que desconozco, se ha cerrado para siempre, cerrado con la sonrisa con la que me recibías y no con la gélida mirada con la que me recibes a través del vidrio de tu ataúd.
Hoy amigo, hemos dejado de ser amigos, ahora somos almas
Déjame esperarte pacientemente vivo… un día te acompañare
Y te prometo que seguiremos siendo aquellos dos niños sentados en las montañas verdes y los ríos juguetones, riéndonos de todo y esperando la vida futura…que no augura la muerte
Hoy voy a orar, para que EL tenga misericordia de ti, se apiade de ti y vea en ti también la sonrisa, veracidad, amor y franqueza que yo vi en ti.
Te extraño amigo y con tu partida has terminado de llevarte lo que quedaba de mi infancia
Un abrazo, no desde donde estés…porque estas en todos lados